La decoración retro ha vuelto a cobrar protagonismo. Los elementos que definieron décadas anteriores vuelven con fuerza, combinando lo mejor del estilo vintage con toques contemporáneos que los hacen más atractivos y funcionales para nuestros hogares actuales. Hoy, en Muebles Nogaroa te enseñaremos cómo estar a la moda sin renunciar al pasado.
En el baño: clásico y lujoso
El baño es uno de los espacios donde el estilo retro puede brillar de manera más impactante, recuperando elementos que, durante décadas, fueron sinónimo de lujo y sofisticación. Un lavabo de pedestal, con su diseño elegante y minimalista, es una excelente opción para darle un toque vintage a este espacio. También puedes optar por una bañera con patas, que no solo aporta un aire señorial, sino que además se convierte en el punto focal de la estancia.
Para completar el look retro en el baño, no podemos olvidarnos de la grifería dorada o de bronce, que aporta un brillo cálido y nostálgico. Los espejos con formas, como los ovalados o geométricos, también son esenciales para añadir ese toque vintage.
En el salón: estampado y vivo
El salón es el espacio ideal para combinar múltiples artículos retro jugando con los contrastes. Los tonos neutros, como el beige, gris o blanco roto, son la base perfecta para crear un ambiente relajado y sofisticado. La combinación de estos con estampados o colores vivos es lo que crea el verdadero estilo retro actual. Los puedes incorporar en cojines, alfombras o incluso en mosaicos de colores en alguna pared o en detalles decorativos.
En cuanto a los muebles, no pueden faltar clásicos como el sofá chéster, una pieza icónica que aporta carácter y un aire de distinción. También puedes añadir librerías antiguas, que no solo cumplen su función de almacenamiento, sino que añaden una estética elegante. Un baúl utilizado como mesilla o los conocidos muebles de oficio, con sus múltiples cajones y aspecto robusto, también son opciones fabulosas para dar al salón ese toque retro que está tan de moda.
En la cocina: materiales naturales
La cocina es la instancia donde rescatar los materiales naturales que evocan calidez y tradición. La madera, ya sea en muebles o accesorios, es la protagonista indiscutible de una cocina retro. Además, las fibras naturales, como el yute en los salvamanteles o en las sillas, aportan un toque rústico y artesanal que refuerza ese ambiente. Las tablas de cortar de madera a la vista, los frascos de vidrio y la cerámica artesanal en la decoración son detalles sencillos pero efectivos.
Otro elemento clave en la cocina retro son los muebles con rejilla de gallinero, especialmente en alacenas o vitrinas. Estos muebles, con su aire campestre y atemporal, permiten jugar con el almacenaje a la vez que aportan carácter al espacio. Si a esto le añadimos azulejos con estampados que recuerdan a las décadas de los 60 o 70, conseguimos un equilibrio perfecto entre lo tradicional y lo funcional.
El regreso del estilo retro es más que una moda pasajera. Es una oportunidad para recuperar la esencia de tiempos pasados, adaptándola a nuestros hogares con toques actuales. ¡Sigue leyéndonos e inspírate para decorar tu casa a la moda! Y no dudes en visitar Muebles Nogaroa para descubrir nuestra colección.